Industria farmacéutica: Cannabis Medicinal e Patentes
Un poco antes de adentrar en la fase de pandemia mundial con el coronavirus, uno de los asuntos del momento en el área de la salud era el cannabis medicinal. La evolución del tema debe ser observada de cerca por los profesionales de la Propiedad Intelectual, puesto que buenas oportunidades aún podrán ser vistas de ese segmento.
Luego de diversas consultas públicas y una larga trayectoria entre la criminalización total y la adopción de medidas cada vez más flexibles en lo relativo al tema, como la apertura para la importación de medicamentos para pacientes con prescripción médica, en 2015, la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa), finalmente aprobó en diciembre de 2019 la reglamentación de productos a base de canabinoides y ventas en farmacias bajo prescripción médica.
Para obtener el registro, las fabricantes precisan del Certificado de Buenas Prácticas de Fabricación, emitido por la agencia reguladora, autorización especial para su funcionamiento, conocimiento de la concentración de los principales canabinoides presentes en la fórmula del producto, documentación técnica de la calidad del producto y tener condiciones operacionales para realizar el análisis del controle de la calidad de los productos en territorio brasileño.
Patentes
Esa apertura iniciada por Anvisa debe abrir un nuevo campo para la Propiedad Industrial y un mercado competitivo y promisor, como ya es realidad en algunos países lo cual sigue allá del uso terapéutico, abarcando una gama de productos que incluye bebidas, alimentos y cosméticos.
Los competidores de ese mercado, a empezar por los que desarrollan productos medicinales para vente en Brasil, deben buscar protecciones relativas a los derechos de la Propiedad Intelectual de sus productos.
Es bien probable que esa regulación sobre el uso del cannabis medicinal abra precedente benéfico no solo para la facilitación de la distribución de medicamentos a base de la planta medicinal para los pacientes que precisan de ellos para complementar sus tratamientos, pero también incentive la pesquisa, la tecnología y la innovación tan importantes para el desarrollo de la nación.